El cuarto libro de Garza de Papel se hizo esperar, pero dicen por ahí que lo que se cocina lento tiene mejor sabor y estamos de acuerdo.

Así que hoy, en un día muy esperado por quienes participamos en un muy lindo proceso de trabajo, presentamos “Silencio en Fractales”, la ópera prima de Ayelén Poggio, quien se estrena en este mundillo acompañada por una ya experimentada Nadia Romero Marchesini.

Con un lenguaje directo y expresiones muy características, muy “nuestras”, Ayelén nos presenta 5 historias individuales pero conectadas estéticamente desde la palabra y gracias al trabajo de Nadia, también desde lo plástico.

Con una sensibilidad particular, la narrativa de “Silencio en Fractales” destila cine, tiene movimiento, tiene luz. Durante su lectura se perciben tintes cinematográficos que nos llevan de viaje a escenas de “Esperando la Carroza”, alguna película de Kusturika y tal vez, también, al clima de las obras de Tomás Gutiérrez Alea. El folklore cultural del día a día, sus entuertos, sus dramas, sus malosentendidos y ciertos pases cómicos construyen los relatos. Historias simples, cercanas, algunas ruidosas, un poco exageradas, otras no tanto, pero todas contadas con observación fina.

Estas 5 historias viven en sus detalles, en sus personajes, en la nostalgia.

El texto de Ayelén y los dibujos de Nadia nos hablan a nosotros desde su propio diálogo, que es verdadero.

Con 88 páginas llenas de vida, Ayelén empieza a publicar con una obra hermosa, como para darse empuje a lo que se viene. De Nadia no hay mucho que decir, una ilustradora multipremiada, con muchas publicaciones y reconocida mundialmente, solo queda agradecerle por su participación y su trabajo serio y detallista, conociéndola, trabajando con ella, queda claro por qué es quién es en el mundo del arte, una genia.

“Silencio en Fractales” es otro libro hermoso que tenemos la suerte de publicar y ojalá sean muchos los que tengan la suerte de leerlo y disfrutarlo.